🚘 VILLA EPECUÉN EN 3 DÍAS 🚘

Este viaje comenzó mirando unos viejos documentales sobre la inundación, y poco a poco, las increíbles fotografías de otros viajeros nos animaron a planear una escapada, a un poco más de 500 km de la ciudad de Buenos Aires.  Aprovechamos el fin de semana de carnaval de febrero del 2022 para conocer este pueblo abandonado que logró ser un centro turístico vibrante desde 1921 hasta 1985.

Día 1

Salimos  en auto con destino a Carhué, ubicada en el distrito de Adolfo Alsina en provincia de Buenos Aires, una ruta muy concurrida en algunos tramos y muy solitaria en otros. Fuimos pasando por pueblos y ciudades que nos hacían sentir un poco más cerca de nuestro destino. Llegamos al centro de Carhué para hospedarnos en el Apart Flavia, ubicado a dos cuadras de la plaza principal Nicolás Levalle. El calor de un día de verano y nuestro deseo de llegar a ver el atardecer sobre las ruinas, nos hicieron ir de prisa a nuestra primer parada “El Matadero Modelo”. Esta obra del prolífero Arquitecto ítalo-argentino se puede visitar de camino a la Playa Eco Sustentable. Las marcas del agua sobre su fachada, el estilo art deco, y los árboles blanqueados por la sal del lago nos hicieron entrar en contacto con la tragedia que acechó a esta villa turística.

Continuamos hacia la playa para poder comprobar si era posible flotar en el agua (obvio que sí!), pero nos sorprendimos por la infraestructura del lugar. El balneario posee un bar, alquiler de reposeras, una pasarela sobre el lago, duchas sobre la arena y baños. Por unas horas pudimos olvidarnos de la historia, y sentimos que habíamos comenzado nuestras vacaciones.

★ Tips: La entrada es libre y gratuita en el Matadero y en la Playa Eco Sustentable. ★

Después del relax, volvió la prisa para aprovechar las últimas horas de sol, y seguimos hacia la boletería de Epecuén. Entramos por la avenida principal  que en la década del ’70 se vió colmada por más de 25.000 turistas, con 6.000 plazas hoteleras y 250 establecimientos comerciales. Hoy quedan carteles con los nombres de los hoteles, algunas paredes en pie, escaleras que no llevan a ninguna parte y azulejos de todos los colores dispersos entre los escombros. La sensación de recorrer cada una de sus calles, nombradas como las principales arterias de Buenos Aires, es de absoluta tristeza.  Imaginar su esplendor, y su tragedia conmueve.

★ Tips: La entrada a las Ruinas es de 200 pesos argentinos (2 dólares) e incluye el ingreso al Centro de Interpretación y Museo.★

Corrimos hacia el “mar de Epecuén” mientras el sol se tornaba a cada minuto un poco más anaranjado, y descubrimos la belleza implacable de aquel atardecer. Sin exagerar, esa puesta de sol fue una de las más bellas que hemos visto.

★ Tips :Llevar repelente, protector solar y agua, ya que no existen comercios allí.  Si les gusta la fotografía lleven un trípode también!.★

Cerramos la noche en la Feria “Al Diente”, sobre la plaza Nicolás Levalle, donde los viajeros entre música y cerveza artesanal, se alejaban del silencio de una ciudad abandonada.

Cómo llegar desde distintas ciudades

Fuente: http://www.termasdecarhue.gov.ar/

Desde Capital Federal: Tomar Autopista Ricchieri hasta Ezeiza y luego la Autopista Ezeiza – Cañuelas. Continuar por Ruta Nacional 205 hasta Bolívar y empalmar con Ruta provincial 65 hasta la ciudad de Guaminí. Luego tomar Ruta Nacional 33 hasta el cruce con la Ruta Provincial 60. Girar a la derecha hasta el acceso a Carhué. Distancia en Km: 540 – Tiempo de viaje: 6 hs.

Desde La Plata: Tomar Ruta Provincial 6 hasta Cañuelas. Continuar por Ruta Nacional 205, luego Ruta Provincial 65 y Ruta Nacional 33 hasta cruce con Ruta Provincial 60. Girar a la derecha hasta el acceso a Carhué. Distancia en Km: 560 – Tiempo de viaje: 7 hs.

Desde Bahía Blanca: Tomar Ruta Provincial 33 hasta el cruce de Espartillar, girar a la izquierda y continuar hasta Carhué: Distancia en Km: 200. – Tiempo de viaje: 2 hs.

Desde Mar del Plata: Distancia en Km: 560 – Tiempo de viaje: 7 hs.

Desde Rosario: Distancia en Km: 650 – Tiempo de viaje: 8 hs.

Desde Córdoba: Distancia en Km: 832 – Tiempo de viaje: 9hs. 50 min.

Desde Santa Rosa: Distancia en Km: 186 – Tiempo de viaje: 2 h. 20 min.

Día 2

Comenzamos la mañana visitando el Camping Municipal La Chacra, que posee un museo al aire libre de maquinarias rurales antiguas y el sendero del Molle, que es una caminata entre especies nativas y exóticas.

Volvimos a cruzar la rotonda que dividía Carhué de Epecuén, y nos detuvimos en otra obra del Arquitecto Salamone “el Cristo del lago”. Caminamos hacia el balneario La Isla, y bordeando el agua giramos hacia la izquierda hasta llegar al antiguo cementerio. El paisaje era desolador, quizás como todo cementerio, pero con la carga de la historia de la inundación y la destrucción de tumbas y estatuas, el sentimiento de tristeza era un poco más profundo. Algunas tumbas parecían ser visitadas aún hoy en día, ya que entre las rocas pudimos encontrar ofrendas de flores de plástico pérdidas entre las ruinas.

★ Tips : Se puede llegar al cementerio en auto girando a la izquierda en la rotonda de acceso a Epecuén.★

Volvimos al camino que va hacia la Playa Eco Sustentable, y nos detuvimos a sacar fotografías a los flamencos rosados y a una hamaca solitaria que nos invitaba a distendernos nuevamente. Continuamos hacia el Centro de Interpretación y Museo para conocer los detalles cronológicos de la fundación y declive de este balneario bonaerense.

Existe un circuito termal con agua del lago climatizada en el Camping Levalle, aunque antes de semana santa del 2022 volverá a funcionar el Complejo Termal & Lúdico Mar de Epecuén, inaugurado el 12 de junio de 2019. También pueden disfrutar de los beneficios del agua termal climatizada en cabañas y hoteles de Carhué. Hace unas décadas los turistas llegaban por cuestiones de salud, y hoy vuelven a hacerlo con una gran variedad de opciones. También se brindan tratamientos estéticos con el barro del lago.

★ Tips : La entrada a las Termas del Camping Levalle es de $ 1.000 pesos argentinos (5 dólares) y el horario es de 10 a 20 hs.★

Volvimos a las ruinas para recorrer con más tiempo las calles laterales, y perdernos imaginando como habrá sido el correo, la heladería o la fábrica de alfajores antes de la inundación.

El segundo atardecer en Epecuén fue totalmente distinto, los turistas y los habitantes de Carhué, algunos de ellos víctimas de la inundación, se congregaron para el espectáculo de Constructores de Fuego.  “La llama de Epecuén no se apagará jamás” fue una instalación de siluetas a escala real, a partir de fotografías de la época de esplendor turístico sobre la calle principal. Al ritmo de tambores, mientras caía la noche, el fuego brillaba sobre los restos del terraplén que cedió ante el desborde del agua en noviembre del ’85.

Día 3

Nos quedaba pendiente admirar otra construcción de Salamone, el Palacio Municipal de Carhué construído en 1938, que combina tres estilos: art decó, futurismo italiano y funcionalismo. 

La última parada fue el Museo “Reencuentro” de Miguel Ángel «Lito» Sottovia, quién fue un condecorado bombero que participó de la evacuación de Epecuén. Hace unos años, su pasión por restaurar objetos lo llevó a abrir este museo en su propia casa. Todo lo que posee funciona a la perfección, y todo tiene una historia. Desde autos y motos hasta máquinas para hacer soda, el recorrido por el museo sorprende a cada minuto. Pasamos más de una hora conversando con Lito, y conociendo los detalles de todo lo que vivió aquella madrugada del domingo 10 de noviembre de 1985. Sus relatos sobre Epecuén y Carhué nos permitieron conocer un poco más de la historia de resiliencia de este paraje del sudoeste de Buenos Aires.

★ Tips : La entrada al museo es a colaboración y las visitas se coordinan al teléfono 02936-432805★

Los alojamientos de Carhué no tenían disponibilidad para más noches, por lo que cerramos nuestro viaje en Trenque Lauquen ubicada a menos de 2 horas, para disfrutar de la tranquilidad y la naturaleza.

Antes de partir

Dejamos atrás Villa Epecuén, con imágenes y sentimientos que nos acompañarán cada vez que la recordemos. Muchos de los lugares que visitamos al viajar nos desafían a imaginar la vida de antaño y conectar con los sucesos ocurridos. A más de 100 años de la fundación de un balneario, las historias de sus habitantes llegan a nosotros como si la vida les hubiera dado otra oportunidad para darle la bienvenida al turismo.